Sabemos que los vestidos son tendencia total en esta temporada veraniega, sobretodo cuando el calor esta a flor de piel diariamente, y elegir uno para lucir increíble no debe ser motivo de estrés, todo lo contrario. Quiero dejare una guía rápida para que puedas identificar que vestido te queda mejor según tu tipo de cuerpo.
Recuerda que no todas somos iguales, además de la morfología, debemos
tomar en cuenta nuestro tamaño, el ancho de nuestra espalda, el tamaño de
nuestro busto y demás detalles tanto, como brazos y piernas.
Pero, si quieres tener una referencia en cuanto a la forma de tu cuerpo, aquí te
dejamos un poco de inspiración. Adáptalas a tu gusto, estilo de vida y tipo de
evento.
Cuerpo tipo triángulo o pera
Este tipo de cuerpo se destaca por tener más ancha la parte inferior del cuerpo, dando volumen a las caderas, dejando la parte superior más delgada.
Lo que debes hacer si tienes este tipo de cuerpo es destacar la parte de arriba con hombreras, mangas en diagonal, mangas gruesas, de tipo globo, escote en V o
tipo barco, volantes, accesorios y estampados, todo aquello que, de volumen a la parte superior, para generar
una ilusión visual de reloj de arena.
Dejar la parte de abajo con una abertura de tu vestido más de tipo A.
De esta manera sumamos peso visual arriba y mantenemos neutra en la parte de
abajo.
Cuerpo tipo Ovalo
Si tú tienes este tipo de cuerpo, los cortes tipo imperio en los vestidos te favorecen. Estos son aquellos cuya abertura de la falda comienza debajo del busto. Hay que evitar telas muy holgadas, o muy ajustadas.
Otra opción es preferir cortes rectos o poco holgados, donde la cintura no esté tan marcada. Los estampados grandes suman volumen, tómalo en cuenta y prefiere aquellos de tamaño más pequeños.
Cuerpo tipo reloj de arena
Con este tipo de cuerpo puedes elegir qué parte de tu cuerpo resaltar. Toma en
cuenta el tipo de evento y el código de vestimenta. Una opción es marcar tu
cintura y cuidar el escote. Hay que enfocarnos en no recargar la atención en el
escote o con algo muy corto en las piernas.
Si tus caderas son anchas, puedes preferir un corte recto o en A para la parte de
abajo. Sería el cuerpo de la típica mujer 90-60-90.
Cuerpo tipo rectángulo
Son aquellos cuerpos que no tienen cintura, pero mantienen líneas rectas entre pecho y caderas. Si tienes un cuerpo con esta forma, tu objetivo será crear la sensación de más curvas y dar forma a tu silueta acentuando la cintura, usando volantes y pliegues tanto
en la parte de arriba como en la de abajo.
Evita a toda costa los pantalones y abrigos con corte recto porque acentuarán la falta de curvas de tu cuerpo.
Cuerpo tipo triangulo invertido
La principal característica de estos cuerpos es que la espalda destaca sobre el resto del cuerpo que se va estrechando según bajamos hacia los pies.
Tendremos que compensar la anchura de los hombros haciendo que ópticamente nuestras caderas parezcan más anchas. Para ello usaremos colores claros y lisos en la parte superior del cuerpo, mientras que dejaremos
los estampados para la parte inferior.
Las faldas con volumen, los pantalones de pinzas, los bolsillos en las caderas… serán nuestros aliados.
Adriana Manzano
Instagram: ady_manzanops
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